viernes, 15 de enero de 2016

ÉTICA DE ROEDORES: LOS ARTESANOS

  Los artesanos conocen el secreto del mundo. Amasan la materia para recordar. Arcilla, pan, vidrio. Lo sabemos. La materia agradece esa sabiduría, la del artesano. Demiurgos caseros: no necesitamos nada más. Todo el universo merece la pena, sólo por eso, por el artesano que madruga y mira por la ventana para esculpir el mundo, ese que todos vivimos. Me dice Miguel Parra que nos olvidarán, que dentro de unas décadas nadie se acordará de nosotros. ¿Quién se acuerda de nuestros bisabuelos? Nadie les recordará, nadie nos recordará. Sólo los artesanos conocen el secreto del universo. Y los jardineros persiguen lo mismo... Nadie sabe escapar de esta burbuja. Recuerdo la masa del pan como si fuese arcilla y recuerdo mis días de harina como si fuesen de... Los artesanos conocen la esencia de los días, con sus nebulosas, con sus incertidumbres, con todo eso que arrastra el nacer. Si no somos artesanos es porque no queremos recordar... Anhelamos una civilización perdida, la que brota de nuestros recuerdos: el árbol, el frío, el horno, la nieve, la piedra, la leña... Tiene razón Miguel Parra: nos olvidarán, sin piedad.